El tren Viejo Expreso Patagónico, que circula sobre una trocha más angosta que la común, descarriló en el tramo entre la estación Nahuelpán y Esquel, unos 1.900 kilómetros al sudoeste de Buenos Aires.
"Ninguno de los pasajeros o de las personas que integran el personal de trabajo a bordo sufrió heridas graves", informó el coordinador del Viejo Expreso Patagónico, Américo Austin. Entre 20 y 25 personas fueron atendidas en el hospital local por heridas leves y golpes.
En tanto, el temporal de viento, lluvia y nieve afectó amplias regiones de las provincias de Río Negro y Neuquén, causando el corte de tránsito de varias carreteras, caída de árboles, interrupción de la energía eléctrica y habitantes evacuados.
En la ciudad de Chos Malal se registraron ráfagas de vientos de 120 kilómetros por hora. La ciudad turística de Bariloche vivió una nevada temprana que sorprendió a los visitantes en esta Semana Santa, pero también produjo muy bajas temperaturas y problemas en el abastecimiento de luz.
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