Sólo Lionel Messi es capaz de opacar a un jugador tremendo. Sólo el juego genial del Barcelona pudo dejar como un simple segundo a los números del Madrid de Pellegrini.
Pero la revancha es un plato que se sirve frío. Cristiano Ronaldo ya tiene el cuchillo y el tenedor. Y la mesa la puso nada menos que José Mourinho, el técnico más ganador que le está sacando el jugo al segundo mejor jugador del mundo. Ya no parece una locura que el Madrid lo haya pagado casi 100 millones de euros. El portugués primero lo devolvió con marketing, después con una montaña de goles (26 en 29 partidos) y en esta 10/11 parece que dejará algún trofeo en la vitrina. Porque el arranque del Real en el torneo (va puntero) y en la Champions es para empezar a descorchar. Y el tremendo baile que ayer le dio al Milan es el mejor ejemplo.
Cristiano sólo se pareció a un cristiano en una sola jugada: un centro atrás de Marcelo al punto del penal, que el portugués de 25 años le dio con el talón y la mandó a la tribuna. Salvo esa pifia, su juego rozó la perfección. Un tiro libre suyo (increíble cómo se abrieron Ibrahimovic y Seedorf) abrió el partido y una corrida con su estilo definió el partido a los 13 minutos del primer tiempo cuando el alemán Ozil marcó el segundo. Lo que llegó después fue un recital de lujos, de toques y de aplausos. Y el conductor de la orquesta fue él, dejando así de chiquititos a cracks como Ronaldinho, Ibra, Pirlo, Pato y Robinho.
Ya con su facha de metrosexual y perfumado hasta la médula, el delantero (ayer jugó por la izquierda en el triple enlace) nacido en Madeira sacó a relucir su verba, que se tutea con lo canchero. “El 75% de la clasificación está hecha. El equipo estuvo muy concentrado, con un ritmo fuerte, jugamos muy bien, con paredes, no hicimos más goles por mala suerte”. Mourinho, que lo considera un jugador más completo que Messi, esta vez evitó los elogios personales para su estrella. No hacían falta.
Cristiano estuvo en lo más alto de la ola en la 07/08 con el Manchester. Ganó todo con el equipo inglés y también consiguió lo mismo que Messi: Botín de Oro, Balón de Oro y FIFA World Player.
No es Cristiano.
Hernan Claus hclaus@ole.com.ar
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