"Ésta es una súper buena época para buscar trabajo, ya que la oferta crece por los reemplazos de vacaciones, los trabajos esporádicos de navidad y vacaciones", afirma Violeta Hurtado, integrante de Cado Capacitación, Asesoría y Desarrollo Organizacional (www.cadoconsulting.cl).
Sin embargo, agrega la experta, todo dependerá de la profesión u oficio que se tenga. "Si andas buscando tu primera experiencia laboral, éste es un buen momento, ya que las ofertas se disparan o sí, simplemente quieres juntar dinero para las vacaciones, también es la época correcta".
Sin embargo, Maite Lecumberri, psicóloga y magíster en Dirección de Recursos Humanos, aclara que para los profesionales con experiencia esta época es lenta producto de que los departamentos y gerencias están enfocados en cerrar el año y proyectarse hacia el año siguiente, sin mencionar los cortes de semana por fiestas de fin de año y ausencias por vacaciones.
Sin embargo, agrega la experta, todo dependerá de la profesión u oficio que se tenga. "Si andas buscando tu primera experiencia laboral, éste es un buen momento, ya que las ofertas se disparan o sí, simplemente quieres juntar dinero para las vacaciones, también es la época correcta".
Sin embargo, Maite Lecumberri, psicóloga y magíster en Dirección de Recursos Humanos, aclara que para los profesionales con experiencia esta época es lenta producto de que los departamentos y gerencias están enfocados en cerrar el año y proyectarse hacia el año siguiente, sin mencionar los cortes de semana por fiestas de fin de año y ausencias por vacaciones.
"Los departamentos de recursos humanos siguen funcionando en estos meses, pero muchas de las entrevistas de trabajo pasan también por las jefaturas de esos puestos, entonces los procesos a veces se lentifican", sostiene.
De todas formas, Lecumberri concuerda con esta visión optimista de que en estos meses se abren más oportunidades para trabajos part time, ventas y retail.
La disposición
Emprender la tarea de buscar un trabajo y encontrarlo, a veces, toma tiempo o no es tan rápido como se quisiera. No es que haya un tiempo predeterminado para calificar la búsqueda de normal o preocupante, pero lo que sí está establecido es que un óptimo resultado será simplemente si se obtiene empleo y luego, se analizará la calidad de la empresa a la que se accede, el cargo, los beneficios y obviamente, la remuneración.
Sea cual sea el corolario habrá que ser perseverante y no claudicar. "Si me quedo en mi casa no va a pasar nada, por eso es importante ir a dejar los currículums, postular a las ofertas que te interesan y siempre ir con una buena disposición y confianza en lograr el objetivo", aconseja Violeta Hurtado.
Por su parte, Maite Lecumberri, que también trabaja en la Universidad San Sebastián, recomienda ir tranquila y con buen ánimo. "Si una persona lleva un periodo largo cesante, quizás se muestre más ansioso y eso no favorezca la entrevista, pero tiene que saber que los psicólogos esperan o es esperable que ese postulante no esté en su mejor minuto".
Añade, que otro tips para enfrentar esos momentos es ser realista y no crearse falsas o grandiosas expectativas, "ni tampoco ir a gastarse la plata porque creo que me fue bien y confío en que voy a recibir dinero a fin de mes, el aterrizaje a la realidad puede ser forzoso".
Por eso, señala, el consejo es ir tranquila, confiada y que si el trabajo es para uno, será. Para mantener esa actitud, propone a su vez, la consultora de Cado, creer en las cualidades que se poseen, los conocimientos que se manejan y presentar un CV apropiado, escrito con lenguaje formal y no más de dos hojas.
"Es recomendable colocar la experiencia relacionada con lo que se está postulando y no todos los trabajos que se han tenido en la vida. Además, incluir un pequeño resumen de tus cualidades, tus objetivos y poner referencias laborales con los datos actualizados de esos contactos".
Además, advierte Violeta Hurtado, que un error bastante común es tener emails infantiles, comogarfield2008@hotmail.com o carlitaaa.-.@gmail.com, por eso invita a tener correo electrónicos con el nombre completo o sus iniciales.
Paralelamente, Maite Lecumberri dice que es imprescindible preparar la entrevista, ejercitarla antes. "Pensar en las preguntas que me pueden hacer, cuáles son mis fortalezas, debilidades, y cómo es la empresa a la que estoy postulando, qué buscan o cuál es la misión y visión que manejan, todo lo que más puedas averiguar para que no te pillen de sorpresa".
Es decir, hacer todo lo que esté al alcance y proyectarse con templanza que, más temprano que tarde, se encontrará firmando un contrato.
Emprender la tarea de buscar un trabajo y encontrarlo, a veces, toma tiempo o no es tan rápido como se quisiera. No es que haya un tiempo predeterminado para calificar la búsqueda de normal o preocupante, pero lo que sí está establecido es que un óptimo resultado será simplemente si se obtiene empleo y luego, se analizará la calidad de la empresa a la que se accede, el cargo, los beneficios y obviamente, la remuneración.
Sea cual sea el corolario habrá que ser perseverante y no claudicar. "Si me quedo en mi casa no va a pasar nada, por eso es importante ir a dejar los currículums, postular a las ofertas que te interesan y siempre ir con una buena disposición y confianza en lograr el objetivo", aconseja Violeta Hurtado.
Por su parte, Maite Lecumberri, que también trabaja en la Universidad San Sebastián, recomienda ir tranquila y con buen ánimo. "Si una persona lleva un periodo largo cesante, quizás se muestre más ansioso y eso no favorezca la entrevista, pero tiene que saber que los psicólogos esperan o es esperable que ese postulante no esté en su mejor minuto".
Añade, que otro tips para enfrentar esos momentos es ser realista y no crearse falsas o grandiosas expectativas, "ni tampoco ir a gastarse la plata porque creo que me fue bien y confío en que voy a recibir dinero a fin de mes, el aterrizaje a la realidad puede ser forzoso".
Por eso, señala, el consejo es ir tranquila, confiada y que si el trabajo es para uno, será. Para mantener esa actitud, propone a su vez, la consultora de Cado, creer en las cualidades que se poseen, los conocimientos que se manejan y presentar un CV apropiado, escrito con lenguaje formal y no más de dos hojas.
"Es recomendable colocar la experiencia relacionada con lo que se está postulando y no todos los trabajos que se han tenido en la vida. Además, incluir un pequeño resumen de tus cualidades, tus objetivos y poner referencias laborales con los datos actualizados de esos contactos".
Además, advierte Violeta Hurtado, que un error bastante común es tener emails infantiles, comogarfield2008@hotmail.com o carlitaaa.-.@gmail.com, por eso invita a tener correo electrónicos con el nombre completo o sus iniciales.
Paralelamente, Maite Lecumberri dice que es imprescindible preparar la entrevista, ejercitarla antes. "Pensar en las preguntas que me pueden hacer, cuáles son mis fortalezas, debilidades, y cómo es la empresa a la que estoy postulando, qué buscan o cuál es la misión y visión que manejan, todo lo que más puedas averiguar para que no te pillen de sorpresa".
Es decir, hacer todo lo que esté al alcance y proyectarse con templanza que, más temprano que tarde, se encontrará firmando un contrato.
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