Caro le ha resultado a la U colaborar con la selección nacional. Con un reducido grupo de jugadores Sampaoli continúa trabajando en La Cisterna, a la espera de ver en qué estado nos devuelven a los ocho seleccionados azules que, luego de la aventura a la que los ha convocado Claudio Borghi frente a Uruguay y Paraguay. Un estado que puede estar marcado por lo físico –un Vargas golpeado por ejemplo- o lo anímico si no se consigue ganar a Paraguay.
El mismo técnico de la selección chilena que sólo cuando hay problemas evidentes recuerda sus deberes, convocando en su última puesta en escena a un grueso número de jugadores de la U e imposibilitando a Sampaoli de trabajar con ellos a horas de jugar un partido decisivo por el paso a semifinales de la sudamericana.
González y Vargas, dos de las figuras de la U convocadas por Borghi a la Roja.
Marcos y Osvaldo González y Eduardo Vargas corren mayores riesgos físicos, además de los rigores y sobrecarga a fin de temporada del preparador físico de la selección. Con menores posibilidades de jugar frente a los guaraníes: Díaz, Rojas, Aránguiz, Mena y Canales, aún pese a los bajos rendimientos de Contreras por izquierda, Ponce y Suazo y además de losahora evidentes y reiterados errores de Bravo, Borghi jugará una mano difícil desde su ya conocida tozudez.
Por contrapartida, Arsenal se prepara silenciosamente en la patria de los sarandíes y anuncia su arribo al Nacional con ilusión en dar el gran golpe y pasar a semifinales de la Sudamericana. Invicto en cinco fechas en la competencia trasandina recupera a Burdisso y Leguizamón. Gustavo Alfaro no se guardará nada el jueves en su visita.
Mucha atención habrá que poner en la terna arbitral –sumando probablemente un cuarto árbitro local- que encabezará el promisorio árbitro colombiano Wilmar Roldán (31), quién recibe la misión de conducir un importante partido a ocho años de su debut dirigiendo un Millonarios – Once Caldas.
Los últimos partidos de Arsenal por un motivo u otro han estado marcados por la polémicas arbitrales: primero al eliminar a Olimpia con las protestas de nuestro muy conocido Gerardo Pelusso. Luego, en la ida victoriosa de la U al viaducto, solamente el temor al dedo pulgar de Julio Grondona –presidente vitalicio de AFA, vicepresidente de FIFA y ferretero de Sarandí- explican los reclamos del polémico Niembro y lo publicado por la prensa sobre un arbitraje desfavorable para el Arse. Un equipo con una pequeña, pero muy poderosa hinchada.
Una teoría personal es que el guardalíneas que habilitó a Vargas además quiso medir su propia velocidad contra las cinco velocidades del sprinter de la U: Eduardo conduciendo el balón dejó desairados a dos zagueros en su impresionante rush y desparramado a Campestrini, uno que viene con ganas de cobrar una factura personal a Eduardo Vargas. Si se repite el mano a mano, favor poner atención en si va sobre el balón o con mala intención sobre el jugador.
Recién el miércoles a mediodía algo sabremos sobre el real estado de la plantilla de la U y del grupo reconformado que buscará clasificar a semifinales, que de hacerlo tendrá que jugar nuevamente la semana siguiente y adicionalmente un clásico universitario este fin de semana. Costos de estar en el primer plano y jugando dos torneos simultáneamente.
