En la cita, el representante del Ministerio Público entregó las conclusiones de acuerdo a los estudios que realizó por varios meses el Idiem de la Universidad de Chile, entre las cuales se dio a conocer que están los problemas en el diseño y construcción de la estructura, además de una falta de control en la construcción y también el error en la clasificación de suelos , “ya que se construyó utilizando materiales pensando en que el tipo de suelo era 2, cuando correspondía que fuera tipo 3 por su mayor complejidad”, indicó el abogado querellante, Fernando Saenger, quien espera que la próxima semana puedan haber formalizaciones por el hecho bajo el cargo de cuasi delito de lesiones y homicidio.
Por el lado de la Constructora Socovil, a cargo de las obras, su abogado Alejandro Espinoza aclaró que “nosotros contratamos al Dictuc y tenemos nuestra opinión sobre las causas y formas en que se produjo este accidente las cuales se darán a conocer cuando corresponda”.
También estuvo presente en la reunión Marcelo Bravo, vocero de los damnificados y sobreviviente de la tragedia, quien indicó que “para nosotros ha sido una información clara y categórica, porque el informe así lo es. Quedamos más tranquilos y es una etapa importante en nuestro proceso de sanación como víctimas el saber la verdad de por qué se cayó el edificio”.
La caída del edificio Alto Río la madrugada del 27 de febrero dejó a 8 personas muertas, además de otras 18 heridas.
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