Hace no muchos años, los Jonas Brothers abrieron uno de los shows de la gira del retorno de Backstreet Boys, la más popular de las boys bands fabricada en los 90. Cuando su turno terminó, Kevin Jonas (22, al centro en la foto), el mayor del trío que ocupó ese mismo reinado adolescente durante el nuevo siglo, evitó refugiarse en camarines y se quedó merodeando el escenario.
"Los vi y me pareció tan cool que tuvieran 30, 32 ó 35 años y que se mantuvieran unidos, que siguieran cantando igual y que tuvieran la misma energía. Pensé que si seguimos como banda, si llegamos a viejos, me gustaría mantenerme como ellos", se ilusiona el cantante, al teléfono desde Lima -una de las escalas sudamericanas de su tour mundial- y enfrentando la amenaza que siempre acecha a los productos musicales que conocen el suceso planetario antes de los 15 años, desde Jackson Five a Westlife, desde New Kids on The Block a N'Sync: el avance del tiempo y el instante en que el carné de sus miembros sobrepasa las dos décadas de existencia.
Ese es el trance actual de Jonas Brothers. Luego de convertirse en las crías más rentables salidas de la factoría Disney en el último lustro y de despachar más de 10 millones de copias de sus cuatro álbumes, la agrupación que completan Joe (21) y Nick Jonas (18) está desde hace un año a medio camino entre un tour que mantiene en alto la marca y las obligaciones promocionales, y noticias que hablan de planes en solitario, de carreras actorales que adquieren más aplausos que las incursiones musicales, de conatos de disolución y de planes familiares que ya suman hasta un matrimonio. Dentro de todo ese itinerario está Chile: tras su show de mayo de 2009 en el Club Hípico, la banda volverá al país este 4 de noviembre en el Estadio Monumental y con un espectáculo que promociona la segunda entrega de la serie Camp Rock.
"Todo lo que nos pasa ahora es parte de la evolución de cada banda", simplifica Jonas. Y su dogma es parte también de su persona: coincidencia o no con su estatus de hijo mayor, el también guitarrista del trío fue el primero en tomar el freno de mano y optó por casarse con la ex peluquera Danielle Deleasa, en la misma fecha en que Joe anunciaba su participación en series como Hot Cleveland y Beverly Hills 9010, y en que Nick, el menor y el más virtuoso de los tres, se aprestaba a lanzar Who I am, su debut como solista. Además, ambos copaban la prensa rosa con informes en torno a sus romances con Ashley Greene o Selena Gomez, entre otras.
Está claro: al menos en el papel, Kevin es el menos inquieto artísticamente. "Cuando escuché el disco de Nick sólo sentí ganas de apoyarlo. Así es nuestra política: todos tenemos libertad para buscar los sonidos que queramos", detalla el artista, quien viaja acompañado de su pareja.
¿Cómo ha sido compatibilizar su rol de esposo con una carrera que basa parte de su atención en la explotación de la vida personal?
No es difícil, sino que todo lo contrario. Te puedo decir que estar casado es lo mejor: ella se ha convertido en mi apoyo y en mi soporte para sobrellevar el ritmo que tenemos los músicos. Ella me asesora, me ayuda y jamás podría decir que es un problema.
Al interior de la banda, ¿le temen al avance de los años?
No, no es algo que nos obsesione. Los fans crecen igual que nosotros y vas envejeciendo con ellos. Y hay muchos casos, como los propios Backstreet Boys, donde los antiguos seguidores se mantienen, pese al avance de los años.
Todos estos proyectos solistas, ¿suponen un fin del grupo para 2011?
No está dentro de los planes separarnos. Tampoco hemos conversado en torno a una pausa. O sea, somos hermanos y vamos a seguir juntos por siempre, entonces perfectamente podemos lanzarnos en carreras solistas y seguir manteniendo vivo al grupo.
Ahora están lanzando la carrera de su cuarto hermano, Frankie Jonas, de 10 años. ¿Qué le parece?
Fantástico, porque es increíble ver desde afuera cómo alguien tan cercano se transforma en estrella.
Aunque Kevin Jonas apuesta por la unidad familiar eterna y por rutas paralelas para seguir explotando el éxito de Jonas Brothers, asegura que por ahora no tienen planes concretos para 2011 ("hay sólo algunas cosas de las que aún no podemos hablar", puntualiza) y desliza la opción de que, de manera muy paulatina, los proyectos solistas irán dominando el destino de los hombres de Hold on. "Tengo pensando un disco solo para más adelante. Joe también está trabajando en nueva música", adelanta.
Lo que sí tiene pensado es el instante de su reencuentro con el público chileno. "Será un show con mucha tecnología, donde repasaremos todos los temas de Camp Rock. Además, se generará un mix muy intenso con Demi Lovato", comenta el mayor de los Jonas ante la participación de otra de las figuras Disney que viene en el tour. Las entradas siguen a la venta a través de Ticketmaster Chile.NOTICIA RELACIONADA :
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