La apuesta de la televisora para el horario vespertino se llama Perla -nombre tentativo-, irá de lunes a viernes a partir de mayo, y plantea un formato inédito en Chile: una combinación de historias reales con estructura dramática, la misma que se utiliza para narrar ficción. Una "teleserie de la vida real" o "real drama", como la definen en el canal, y que está en marcha: ya se han grabado algunos de los 80 capítulos que tendrá.
"Tiene que ver con una evolución del género, con una reinvención. No porque esté agotado, sino que queríamos buscar una diferenciación con otros programas que tocaban los mismos temas. Explorar otros formatos y horarios", explica Rodrigo Leiva, productor ejecutivo del área de docurreality de Canal 13 sobre cómo surgió la idea de la serie. Y lanza la frase que los motivó: "Las mejores historias están en la vida real".
La teleserie de la vida real está protagonizada por dos jóvenes: Cony, de 15 años, una aspirante a cantante que llegó a la producción tras ser elegida en un casting. La otra es Perla, una gitana que el año pasado protagonizó un capítulo del docurreality Valientes y que, a sus 17 años, llamó la atención por su carisma y personalidad, al punto que fue invitada a A tu vida le falta Aldo y La casa por la ventana. Con ambas adolescentes hay un acuerdo que el canal cerrará la próxima semana.
Cony y Perla son los ejes de una historia que rápidamente las une. Como se puede ver en dos capítulos de prueba, terminan cruzando sus caminos por un primo de la joven gitana. A primera vista, lo que resalta es la mezcla de humor y drama, la música juvenil de fondo y una cuidada posproducción.
Una alta fuente ejecutiva detalla las razones para optar por este proyecto para las 20 horas: "Es una historia con todos los códigos de la ficción, tiene personajes novedosos y la cuota de realidad". Y aunque no hay referentes exactos, esta nueva serie tiene parentesco con Laguna beach o The Hills, de MTV. La diferencia es que en Canal 13 optaron por programarla de lunes a viernes y no semanalmente, como esos espacios. Y que se busca una cuota de realidad mayor, con la menor intervención externa en los acontecimientos de los protagonistas posible.
"Lo primero que establecimos fue no violar la realidad, la integridad del personaje. Aquí hay un seguimiento respetuoso. Por eso hay que tener capacidad de reacción para seguir las posibilidades de lo que va pasando", cuenta Julio Rojas, jefe de guionistas de la televisora, que ha asesorado la producción.
El equipo del área de docureality lleva dos meses trabajando en el proyecto. El seguimiento permanente se realiza con dos cámaras, y se complementa con grabaciones caseras y de celulares, para "darle mayor tinte de realidad", como explican. Aunque la mayoría de los protagonistas de las historias son jóvenes entre 15 y 20 años, en la señal dicen que apuntan a un público transversal.
Perla se está trabajando con un equipo que mezcla libretistas de ficción con guionistas de telerrealidad, pero como coinciden Leiva y Rojas, resulta difícil planificar por adelantado hacia dónde irán las cosas, por la cuota de incertidumbre que inserta trabajar con la vida real.
Una de las ventajas de este formato, además, es que sus costos son considerablemente menores que los de producir una teleserie, que por estos días manejan presupuestos de unos $ 30 millones por capítulo, ya que se hace con menos personas, no hay que construir sets ni invertir en decenas de actores.
En cuanto a las expectativas, una alta fuente ejecutiva del canal comenta: "Esperamos que tenga un desempeño mejor que las últimas telenovelas en ese horario. La idea es ir a ganar. Vamos a ir a competir fuertemente por el liderazgo en la franja, con un producto innovador que se hace cargo de lo que está pasando en el horario". Detallando que en los últimos años, los hábitos de consumo televisivo a las 20 horas han cambiado, ha disminuido el nivel de consumo y, con eso, ha bajado la inversión publicitaria. Julio Rojas opina: "La gente se siente atraída siempre por lo mismo: una buena historia, lazos afectivos y buenos personajes. Esas claves son válidas para las teleseries, las sitcom y en un formato como éste".
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