Lo vienen trabajando hace rato y todavía no sale humo blanco pero Elton John sigue en pie como la principal carta que la organización del Festival de Viña baraja para sumar a la próxima edición de febrero. El clásico cantante y compositor británico ya tiene comprometida una venida a Sudamérica, con una fecha lista en Perú, y la idea es aprovechar para tenerlo en la Quinta Vergara.
El Festival recientemente anunció su gran jugada en el terreno latino, Luis Miguel, que vuelve al escenario que lo vio brillar por última vez hace 18 años y actualmente se mueve en la estratósfera de las luminarias de la canción. Un millón de dólares costó la gracia y para equilibrar la balanza, los organizadores quieren tener un artista igual de potente pero anglo.
En esa partida, el autor de “Don’t let the sun go down on me” es desde hace un buen tiempo la principal meta de los ejecutivos. Pide 750 mil dólares y las negociaciones van por el lado de cómo se puede hacer negocio para toda la región, posiblemente incluyendo Brasil y Argentina, y así poder hacer calzar la agenda para que los últimos días de febrero esté frente el “Monstruo” y llenándose de Gaviotas de Plata.
Sir Elton John vive un gran impulso a estas alturas de su dilatada carrera. En la temporada 2011 cosechó los réditos de su aclamado disco 2010 junto a Leon Russell, “The union”, elegido por la prensa especializada como uno de los mejores de ese año. También hizo la banda sonora de la película “Gnomeo y Julieta” y mantiene su status de ser uno de los más prolíficos, exitosos y creativos nombres de la música británica en las últimas décadas.
Además de Luis Miguel, la última tanda de anunciados del certamen incluyó a Luis Fonsi, uno de los créditos románticos de la última década a nivel latinoamericano. Antes también habían fichado Juan Luis Guerra, Camila, Diego Torres, Los Bunkers y Prince Royce.
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